Camino de Santiago

Remontándonos a su origen, el Camino de Santiago fue la ruta de peregrinación más importante de la Europa medieval y uno de los hechos de mayor relevancia y beneficio para la historia de España. Además no hay que olvidar que esta ruta jugó un papel fundamental en el fomento de los intercambios culturales entre la península Ibérica y el resto de Europa durante la Edad Media.

El Camino de Santiago Primitivo debe su nombre a que fue el primer camino de todos, el realizado entre la entonces capital del reino, Oviedo y la recientemente encontrada tumba del apóstol Santiago el Mayor.

Los peregrinos comenzaron a transitar por el norte de España, no sin grandes dificultades, para llegar al fin del mundo medieval que eran por entonces las tierras de Galicia (Finisterre). El itinerario clásico del siglo XII, que se convertirá en el trazado por excelencia bajo la denominación de “Camino Francés”, se describe en la primera guía existente al uso, el Códice Calixtino.

El Camino de Santiago Francés o Ruta Jacobea, como también se le llama, fue declarada Primer Itinerario Europeo de Interés Cultural por el Consejo de Europa en 1987 y está considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, inscrito en 1993.

Entre otros galardones, el Camino ha recibido el de Itinerario Cultural Europeo por el Consejo de Europa y el título honorífico de Calle Mayor de Europa.

El Camino de Santiago en la actualidad

Durante la Edad Media el Camino de Santiago era un recorrido clave en el desarrollo de la identidad europea, su comunicación y el intercambio de ideas y proyectos. Y aunque fue un camino muy concurrido, poco a poco fueron olvidándolo.

Ya sea como un camino de peregrinación religiosa, para obtener la indulgencia plenaria y borrar todas la penas que una persona ha ido acumulando con el tiempo por su pecados, o simplemente como una ruta turística con la que conocer de cerca las tradiciones y gentes de los pueblos que recorre, en la actualidad el Camino de Santiago ha vuelto a tomar un gran auge, siendo visitado cada año por miles de personas de todo el mundo con el objetivo de llegar a la meta: Santiago de Compostela, lugar en el que se veneran las reliquias del apóstol Santiago El Mayor.

Si no lo sabías, existe más de un Camino de Santiago y la mayoría de ellos atraviesa la comunidad autónoma de Castilla y León. Seguramente después de esta lectura quieras comenzar a organizar tu viaje para hacer cualquiera de ellos.

Camino de Santiago por Castilla y León

El Camino de Santiago es una larga ruta que atraviesa la comunidad autónoma de Castilla y León horizontalmente. Llega por Burgos desde La Rioja, atravesando la provincia para llegar a Palencia y por último a León. Algunos de los edificios románicos más importantes de toda España se construyeron en el Camino de Santiago, en pueblos como San Martín de Frómista o San Isidoro de León.

El denominado Camino Francés es la ruta santiaguista por excelencia, el itinerario más conocido, transitado y mejor acondicionado de todos. Arranca en Roncesvalles (Navarra) y llega hasta la ciudad española de Santiago de Compostela (Galicia), recorriendo 750 kilómetros. De ellos, más de la mitad discurren por la comunidad de Castilla y León: 450 kilómetros.

Dada esta extensión, Castilla y León está atravesada por 12 rutas del Camino de Santiago, que la recorren en todas las direcciones y discurren por sus 9 provincias. Además del conocido Camino Francés, existen 7 caminos denominados “históricos” y otros 4 llamados “tradicionales”, de los que pasaremos a dar detalle a continuación:

Caminos históricos

• Vía de la Plata: ruta de época romana, que se utilizó también como camino hacia Santiago de Compostela. Atraviesa las provincias de Salamanca, Zamora y León, provincia en la que se une al Camino Francés. En esta ruta se encuentran muchos restos de calzadas y miliarios romanos.
• Camino Portugués de la Vía de la Plata: una de las variantes de la Vía de la Plata que inicia su camino en Zamora y se adentra en tierras portuguesas para continuar hacia Galicia. Discurre por la zona noroeste de Zamora a través de las comarcas de Alba y Aliste.
• Camino Mozárabe Sanabrés: ruta mozárabe del Camino de Santiago, otra variante de la Vía de la Plata que pasa también por la provincia de Zamora, en la cara norte de la Sierra de la Culebra, por el Valle del Tera y las comarcas de la Carballeda y Sanabria.
• Camino Vía de Bayona: itinerario jacobeo que une la localidad francesa de Bayona con el Camino de Santiago Francés a través de la provincia de Burgos y que, según diversas fuentes documentales, era un camino muy transitado entre los siglos X y XIII.
• Camino del Besaya: camino que une Cantabria con el Camino Francés a través de la provincia de Palencia, siguiendo el cauce del río Besaya, el que da nombre a este Camino. Antaño suponía un itinerario más cómodo y seguro para los peregrinos cuyos barcos atracaban en la bahía de Santander.
• Camino Vadiniense: trayecto que discurre por la provincia de León, uniendo Cantabria con el Camino Francés, a través de los Picos de Europa, visitando en su recorrido la Comarca de Liébana y su Monasterio.
• Camino del Salvador: recorrido que une León con Oviedo. En la Edad Media fue muy transitado por los peregrinos para visitar las reliquias de la Cámara Santa de la Catedral de San Salvador.

Caminos tradicionales

• Camino de Madrid: conecta la capital con Santiago, atravesando las provincias de Segovia y Valladolid, para unirse en la provincia de León al Camino Francés.
• Camino de Levante y Sureste: trayecto que une el Mediterráneo con Santiago de Compostela a través de las provincias de Ávila y Valladolid, y entra en la provincia de Zamora por dos variantes: la de Levante más al sur, que llega a la capital y la Sureste algo más al norte.
• Camino de la Lana: comienza en la provincia de Cuenca y se une al Camino Francés en la ciudad de Burgos, atravesando las provincias de Soria y Burgos. Ruta comercial que, como muchas otras, se transformó en ruta de peregrinos.
• Camino Real de Invierno: ruta que recorre la zona de El Bierzo leonés y era utilizado por los peregrinos en la época invernal para evitar la subida al Cebreiro. A través de viejas calzadas romanas, los peregrinos alcanzaban Galicia en un trayecto más sencillo.

Llegar a la Catedral de Santiago de Compostela

La idea de llegar a la majestuosa Catedral de Santiago siempre es un momento muy emocionante para los peregrinos. La emoción se desborda cuando por fin se encuentran a los pies de la fachada de la Plaza del Obradoiro, la principal postal del templo y una de las obras culmen del Barroco español. La Catedral de Santiago de Compostela es uno de los lugares de culto más importantes de la esfera católica, estando por detrás de San Pedro del Vaticano y Tierra Santa.

Sin importar si han hecho solo los últimos 100 kilómetros… ni si han pasado un mes completo en la ruta jacobea… ni si la han hecho a pie, a caballo o en bicicleta… los peregrinos han ido sellando en cada parada la credencial con la que al final reciben la compostela al llegar a la tumba del Apóstol.

Aunque el 25 de julio es el día grande de Galicia, festividad de Santiago Apóstol, podrás disfrutar de la visita a la Catedral de Santiago de Compostela cualquier día. El peregrinaje se mantiene de manera permanente durante todo el año.

Culminar el Camino de Santiago (bien sea porque lo hagas al completo o por tramos) supondrá el final de una etapa de tu vida. La mejor experiencia que vivirás durante el recorrido del Camino y la que todos los que ya lo han experimentado recalcan, será las relaciones que con otros peregrinos. Piensa que todas las personas que van a pie hacen más o menos los mismos kilómetros al día. Por ello acabas coincidiendo en diferentes lugares de la ruta con los demás peregrinos, se crea una “comunidad” y formarás lazos que permanecerán para toda una vida.

Transporte durante el Camino de Santiago

Si conoces a alguien que haya hecho el Camino de Santiago, ya te habrá contado que es una actividad recomendada para todas las personas, sin importar la edad ni la condición física.

En primer lugar deberás diseñar tu camino decidiendo qué ruta hacer, ya que de esto dependerán las etapas en las que dividirás tu recorrido y los kilómetros que harás cada día.

Puedes hacerlo solo o acompañado; andando, en bicicleta o a caballo…

Has de saber que los meses de abril, mayo, junio, septiembre y octubre son los más recomendables para hacer la ruta de Santiago, ya que se disfruta del mejor clima.

Ten en cuenta que el Camino de Santiago Francés es muy concurrido durante el verano y hacer el recorrido en invierno implica que algunos servicios como albergues, hostales, residencias, restaurantes, mesones… podrían encontrarse cerrados.

Las altas temperaturas, el agotamiento o cualquier otro inconveniente no serán impedimento para que disfrutes de tu Camino como lo habías planeado. Autocares La Regional cuenta con rutas en todo el trayecto que cubre Castilla y León, por si te sintieras cansado o si prefirieras hacer alguno de los tramos en autobús.

Además, si quieres hacer el Camino de Santiago en bicicleta y en algún momento de la ruta tus fuerzas decayeran, Autocares La Regional te transportará a ti y a tu bicicleta hasta el punto del Camino que desees para poder descansar y continuar. 

Como ves, Castilla y León te invita a peregrinar y en La Regional te ofrecemos la seguridad y la garantía de que podrás cumplir con las etapas del Camino de Santiago que te hayas marcado, si te fallara la energía.

De lo que se trata es de volver a casa con la mochila rebosante de paisajes, gentes y experiencias enriquecedoras.

¡Buen camino!